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Poesías

Poesías

Poesía actual(para Maribel y mi hija Julieta, en su barriga embarazada).

Primavera

Veo tu imagen,
diviso contornos diferentes,
sigo las formas,
toco múltiples sensaciones.

Abren compuertas
mis sentidos
ante tanta vida.
Aprendo en las fantasías
y jugando con mis hijos
existo soñando.

Amo desde el momento
que conocí tu presencia,
corporal, jugosa y sensual,
compleja experiencia.

Tramas con salidas,
enredos de pasión,
origen de tantas vidas
y búsqueda de reparación.

Juntos, crece la esperanza
en esta familia,
como una flor regada
con poesías de soles,
raíces en la historia
y lunas de amores.

Sentir en ti

Huelo estas letras,
gusto tu sudor,
escucho tu voz,
palpito tu presencia,
imagino tu silueta,
paladeo los besos convidados,
juego con nuestros cuerpos,
toco tus curvas y cuevas:
Entro en tu ser
donde me dejo perder.

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Poesías amadas

La estética de vivir

La estética del vivir
la propia existencia
como un juego
con cartas marcadas
necesarias y posibles
construyéndolas
imperfectas y mortales.

La búsqueda de sabiduría
atravesándonos con el amor.
Las derrotas,
los malestares,
la insatisfacción,
el desesperar:
son compañeros de viaje
en nuestros caminos
a transitar hasta morir.

Conociendo la inmortalidad
por nuestros hijos,
el placer y la alegría
con nuestra mujer
y escasos amigos.

¿Cuándo sabré ser el jinete
de mi propia vida?
¿Cuándo seguiré el viaje
histórico,
biológico
hacia el ser uno mismo
desde el nosotros?
¿Cuándo dejaré de preguntar
y comenzaré a responder?

Crear coincidió siempre
con soñar, querer o desear...
cuenta el desasosiego de Fernando.

Borrando el camino construido,
huyendo de las señales sentidas,
me encuentro perdido.
¿Qué he ofrecido?
Pelear distintas luchas padecidas,
recuperarme, superando lo huido.

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Hombre que espera un hijo

Uno espera la presencia de lo nuevo.
Compartir la creación de la vida
para profundizar la historia
con la mujer que ama.

Juego y trabajo
a respetar el amor.
Siento la vida bella,
superación del pasado
cuando arranco
las raíces al volar.

Descubro sin máscaras
el reír y el llorar.
Lleno los miedos con presencias.
Recupero los sentidos nuevamente.
Vivo paso a paso con plenitud.
Comprendo desde el ser
que a pesar de la vejez
vuelvo a nacer.

Saber al crear.
Imaginar al poder.
Soñar con un después.
Amar porque todo es distinto, ahora.

A ti, a el, a ella...
doy mi corazón.
Luego que mi cerebro,
a vuestro cuerpo
entregué.

"A mi mujer
y a mis hijos,
gestando este maravilloso año 2003".

Dr. Alejandro Wajner
abril 2003.

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A mi nuevo hijo

Hijo del aún,
morador en el amado útero protector,
depósito de fantasías y deseos,
del futuro constructor.

Desde tu acuático mundo
Pienso verte volar al sol,
atravesar estrellas,
cosmos de misterio y belleza.

¿Cómo es tu noche,
piensa mi vida?
¿Cuántas luces rodean
el oscuro albergue materno?
¿Cuáles sonidos acompañan
tu rutina diaria?
¿Quiénes desde la historia
participan en tus imágenes?
¿Qué monto de alegría guardas?
¿Cuánta tristeza te esperará cuando emerjas?

Eres todos tus sentidos,
un cuerpo de lenguajes,
futuros sociales engranajes,
en la maquinaria de la vida.

Yo, desde aquí,
transcurro posibilidades,
tu, desde allí,
imaginas necesidades.

Dos mundos diferentes,
separados por generaciones,
tiempos y espacios,
serán cruces afluentes.

Eres el amor que puedo,
el desafío que creo,
la tarea que debo,
el sentido que dejo.

Mi camino es tu ruta,
nuevos rodeos,
creativos senderos,
a puro valor y construida sabiduría.

Diciembre del 2003
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El girasol

Vulnerable Luna que mira
Esta relación amorosa
Que crece y nos goza
En el útero protector,
Envuelto con escasas palabras
Para tantas imágenes
Sentidas sensaciones
Vivimos tu porvenir.

Al inicio, uno.
Eramos dos,
Quisimos, tres,
Pedimos, cuatro.
Ahora estos somos.

Espero un girasol.
Un hijo nuevo.
Universo que gira,
Búsqueda de un Sol.

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Poemas para mi mujer gestante

Maribel:
gestas nuestra hija
con valentía
caminando
pasos sin recorrido,
aprendiendo
el futuro
compartido.

Temores te recorren
miedos viejos
con disfraces
tanta pasión
y alegrías
los transforman
en melodías.

Música del alma
sonidos con sentidos,
tacto, gusto y olores,
esperan al recién nacido.

Poemas sin palabras,
cuerpos en canciones,
maduras intenciones
de profundo amor.

Historia nueva
de una pareja
que pelea
su queja.
Y que construye
enamorados momentos.

No todo he hablado.
Quedan sensaciones,
bonitas canciones,
mejores sueños,
posibles amores.

Entre tu barriga
y nuestro vínculo
existe un intenso
y permanente
ir y venir.
Nosotros
somos
siendo
este hermoso
futuro.

Somos padres de hijos,
búsquedas transcurridas
y encuentros enlazados
pasados superados
y futuros compartidos.

Pareja nunca vieja,
bailando esta vida,
cercana belleza,
curadas heridas
se alejan.

Recibo
todo lo que puedo pedir.
Necesito
seguirte hasta mi fin.

Dame ese amor
que me convidas:
suavidad y alegrías.

Maribel:
Entra en tu humanidad,
tanto,
puedo aún darte,
cuanto?.

Tu amor, Alejandro
esperando diciembre del 2003.

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Caminos

Camino calles vacías
llenas de vidas perdidas:
huellas sin rastros,
pasos repetidos.

Retazos de sentidos,
solitarios en muchedumbre,
fantasmas del derrumbe,
afectos desvestidos.

Niños que trabajan,
cartoneros y mendigos,
buscan afligidos,
corazones que viajan.

Ruidos, imágenes, olores,
asesinan y empobrecen.
Mensajes, creencias y órdenes, son licores
que aturden , embriagan y todos obedecen.

Penas,
dolores,
efímeras alegrías,
encuentros sin esperanza.

¿Cuantos caminos
he recorrido?
¿Cual es el destino
que me han impedido?

Pasos de pasos
he sufrido
tantos impedimentos
transcurridos.

¿Puedo,
acaso, cambiar
todo lo que pierdo
al vivir?

Dr. Alejandro Wajner

Soy padre por ti

Soy amor contigo,
si no,
soy una simple queja,
un recuerdo del dolor.

Soy padre por ti,
por tener dos hijos
de tu cuerpo gestante y amoroso.

Por compartir la esperanza
desde ellos,
la alegría
que vivimos juntos.

Porque soy por tu presencia.
Sólo así,
dejo de ser sombra
de lo que no pude.

Soy al ser contigo,
sustancia,
materia de nuestro amor.

Adjetivo,
modalidad del vínculo
y Verbo,
acción del amar,
estado del padecernos
siempre en crecimiento
y situación de cambio.

Pude porque puedo,
contigo.
Podré,
porque el nosotros
será siempre mi deseo.

Seré, mejor de lo que fui,
lleno de tu belleza
y embriagado
por nuestra alegría
de estar juntos,
siendo,
en cada momento,
una pareja,
que permite ser.

Tu esposo,
amante
y padre,
contigo
de dos bellos niños
creados con el amor
que nos convidamos
siempre.

Alejandro,
un día del padre
del 2004
¿Cual es el espacio
entre tu y yo?

Un territorio de idiomas diferentes,
múltiples miedos,
proyectos y deseos.

donde el devenir
como un lazo de amores
conquista
las ilusiones
de la eternidad

en ese escaso momento,
juntos,
así,
ahí,
aquí,
ayer,
hoy,
mañana.

Alejandro Wajner

¿ Qué es el amor?
Ella.
Vos.
Esa mujer
que me acompaña
en este Mundo

cuyo cuerpo agazajo
cuando al explorarlo,
juego
desde el territorio
de los deseos,
donde los sentidos
perpetuan
nuestra existencia.

Esa hija joven,
el niño en crecimiento
y la beba.
De ellos aprendo,
con ellos, disfruto.
Son mi familia
que embellece,
dando sentido,
mi vida.

© Alejandro Wajner

La alegría
( de Julieta)

Cada novedad es un logro
un paso en el inmenso camino
a transcurrir.
Esa sonrisa
con la que agazaja
su hermosos existir,
construida desde
nuestros cuidados y amores.
La conquista de cada día
abre la esperanza,
acerca nuestros movimientos
hacia el universo del asombro,
de fantasías y nuevos sueños,
que retornan y surcan
el presente luminoso.

¿ Cómo reemplazar con letras
los números de la dicha?
¿ Los sonidos del disfrute,
los olores envolventes
del amor?

© Alejandro Wajner

Discutir es herir.
Tomar al otro como nuestra negación,
anular el sentir que une
por el reemplazo
que rechazamos.

Discutir es callar.
Equivocar las sensaciones
y errar los sentidos,
caer en el malentendido.

Discutir es dejar.
Lo que acabamos de empezar,
lo que tratamos de construir,
con nuestra posibilidad de amar.

© Alejandro Wajner
2005

Una voz

Soy una voz.

Cocino letras
Que mantendrán el recuerdo.

Dibujos imagino
Retratos del deseo.

Papeles acumulo:
llenos con olores ideales,
vacíos de disgustos y malestares.

Busco en las palabras
la esencia que pido.
Les entrego, mis hijos,
todo lo que he podido.

© Dr. Alejandro Wajner
Marzo de 2005

Melancolía

Una voz sin auditorio,
Un recurso sin reconocimiento,
La imposibilidad como experiencia.

Los Otros, ausentes
necesarios momentos.

Esa manera de
transitar los hechos,
percibir las carencias,
palpitar siempre el Aún.

Cruzar la falta,
Sufrir lo incompleto,
Abrazar la angustia
Y
Vestir de soledad.

© Dr. Alejandro Wajner
Enero 2005

Este 10 de enero, 48 vidas he transcurrido.
Intento descifrar los misterios
del amor,
de la amistad,
del conocimiento,
del bien y del mal,
del dar,
del gozar,
del soñar,
de la creación de más vida.

48 vidas con triunfos y fracasos,
pasados y presentes,
caminos al futuro
desde los proyectos
para hacer la historia
y
dejar una ética.

Vivo tranquilo y alegre
pues al dejar de ser,
ellos (Laila, Ezequiel, Julieta y Maribel),
seguirán siendo
mejor,
de lo que pude ser.

© Alejandro Wajner
10 enero 2005
¿ Qué es el amor?
Una posibilidad de ser.
Una necesidad del ser.
Un proyecto para ser.
Un camino donde ser.

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Apenas 10 años juntos,
cerca,
dentro,
fuera,
mas allá de los sentimientos,
los afectos,
desarrollándonos cada momento
soñando mejores horizontes
construyendo futuros próximos, actuales
huellas del ayer,
pasos del devenir.
Hijos, amores, proyectos.
Problemas, soluciones.
Enigmas, develaciones.

© Alejandro Wajner
enero 2005

Canta Daniel Viglieti:
" ¿Cuantos cambian de zapatos y de vestir?
Y son tantas las preguntas
tan urgentes
ya no hay tiempo
para siempre...."

2004
Este año
y el que vendrá
me convidaste
con tus ojos,
tus palabras,
tus sentimientos,
tu presencia,
tu distancia
y cercanía.

2005
Yo te ofrecí
mi persona:
mis sentimientos,
afectos,
fantasías,
miedos y ansiedades.
Mis proyectos,
mis caídas.
Mis actos,
los logros,
el trabajo,
la amistad,
el amor,
los cuidados,
los juegos,
los deseos,
los placeres,
las utopías.

Somos
atravesando el pasado,
forjando el hoy
y creando el mañana.
Somos siendo:
el aún
y el
tal vez.

Somos porque estamos juntos
en diferentes espacios
y mundos,
Queriendo
sernos.

2004- 2005
Alejandro Wajner,
mi mujer y mis tres hijos:
tantos colores , flores y
perfumes
de mis amores.

Golpear al caido: una costumbre universal.

Golpear al caido:

Una costumbre humana
contemporánea.

Cuando alguien cae
por no soportar
el sistema,
los demas descargan
sus emanaciones y pestilencias
sobre él.

Las burlas y las críticas
envuelven
tanta mierda
y
cubren las envidias y maledicencias.

La mayoría
fue criada en la violencia
y la intolerancia que
reinan en este inMundo
cotidiano.

¿Por qué los comunes deberían ser mejores
si son alimentados
con mierda
y agresión por doquier?

Pegar al caído
es un deporte universal.
Una hermosa y bella costumbre global:
debemos sacrificar a alguien
creyendo que purgamos
lo indeseable de nuestro
existir.
Y podremos tolerar
tanta
miseria.

Peguen al que es diferente:
al feo,
al sucio,
al que pretendemos malo.

Destruyamos todo lo que concebimos,
imaginamos,
soñamos.
Depositemos en ese Otro
excluido,
todo
lo que evitamos,
tememos
y apartamos
de nuestra cotidiana
socialización.

Ser humano
es tener,
poseer,
acumular,
guardar,
romper,
destruir,
impedir,
evitar,
dañar,
matar,
odiar,
temer....

¡ Golpeame:
Soy lo que tu serás!
¡ Olvidame pronto! ,
como haces
con tu permanecer y transcurrir.
Sientes en mí
tu peste
que evitas
sin poder.

Hoy,
soy
el que tu destruyes,
mañana:
vivirás tu inmanente
desaparición.
Tu cuerpo
te reclamará
el pago de tanto
sinsufrir
y dejarás de
pertenecer
a ellos,
los demás,
que te abandonaron
al nacer.

¡ Goza tu inhumanidad:
Mundo desigual e injusto!

© Ale Wajner
Octubre 2004

A María,
ida en noviembre.

Mamá:

Este día, como otros,
recuerdo nuestra historia:
mis inicios,
tu juventud hacia la madurez,

conmuevo mis afectos
con bellos pensamientos
retengo tu imagen
y así, dialogo contigo.

Sintiendo tu presencia
persiste el compromiso
perpetúo lo mejor de ti en mí.

Ale Wajner
A María, mi mamá,
ida en noviembre del 2003,
en este 17 de octubre,
día del madre

Hojas que caen en otoño

Llegó marzo con su humedad, viento, tiempo fresco, lloviznas y los días más
cortos. La ciudad cambia de colores: los niños van a clase, los adultos al
trabajo, mucha gente cartonea, los viejos se preparan para las gripes y las
parejas jóvenes descubren nuevos amores.

Una nueva guerra conmueve al Mundo. Las protestas se mezclan con la
indiferencia general.

Acá, ella tiene más de setenta años vividos. Desde hace cuatro quedó
postrada por una parálisis de medio cuerpo izquierdo. Su esposo con sus
hijos
decidieron que viviera en su hogar ayudada por unas señoras. Transita sus
espacios cotidianos en silla de ruedas: de la cama al baño o a la cocina.
Mira televisión, escucha radio, intenta leer sus novelas de amor y de
escenarios
felices.
En su cabeza juegan el pasado con las fantasías y el miedo. Los recuerdos
aparecen en su presente y ella se enoja y discute con ellos. Disfrazados
como actores, cambian de ropas. La tristeza ocupa el lugar de su olvidada
sombra.
Ella pide por su mamá. Quiere que vuelva a cuidarla. Exige mimos, abrazos y
besos calentitos.
Es una viejita con mente de niña que por momentos cree jugar con sus
muñecas, charlar con imaginados antepasados y temer horribles miedos.
Nadie acepta este destino. Su presencia señala nuestras limitaciones. El
dolor y la muerte visitan nuestra casa.

Cada año empeora su salud. Ahora, ella empeoró. Parece querer abandonarnos.
Tal vez decidió acabar con la cárcel de su cuerpo que la encierra y
aprisiona.

Una hoja cae este otoño.
Y nuestro dolor la acompaña.

A mi mamá, María
en estos difíciles días.

Alejandro Wajner, abril del 2003.
...Y la hoja cayó un triste 3 de noviembre del 2003

A tus 18

Había una vez
una niña
con nombre de Noche
nacida un Día
de todas las madres
que creció en un hogar difícil
pero que, poco a poco,
logra con esfuerzo
construirse de nuevo
tomando lo mejor
de cada ser que conoce y vive.

Pronto serás una mujer,
iniciarás la vida de estudios superiores
y trabajos diversos.
Recorrerás múltiples amores
y encontrarás alguien en quien confiar.

Mis deseos son mi amor dentro de tí:
sos la esperanza en seres mejores
y la belleza de lo esencial.

Tu papá Ale
un 19 de octubre de 2004
a tus 18 años.

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