A 9 MESES DE LA MASACRE DE CROMAÑON
A 9 MESES DE LA MASACRE DE CROMAÑON
NO ES ESTRAGO, ES HOMICIDIO
9 meses tardamos en gestar un hijo. Nueve meses llevamos de lucha, construyendo caminos entre nosotros, y encontrando piedras que intentan llevarnos a la desesperanza. A 9 meses, en lugar de un nacimiento, nos encontramos con un nuevo asesinato.
Cuando los grandes medios decían la tragedia de Cromagnon, nosotros decíamos, con razón, la masacre de Cromagnon. Masacre, asesinato en masa.
Cuando ahora la llamada Justicia, o mejor dicho el Poder Judicial, dice estrago para calificar el crimen cometido por Chabán, Ibarra y otros, nosotros decimos asesinato, homicidio. Decimos que hay que respetar la primera calificación del delito que hacía la jueza Crotto, homicidio simple con dolo eventual.
Porque nos parece terrible, y no es nada inocente, sacar de nuestra cabeza y nuestro corazón la palabra justa para lo sucedido el 30 de diciembre del 2004. Fue un asesinato. Fue un homicidio. Agravado por la cantidad enorme de víctimas. Ese homicidio tiene responsables claros y concretos que hasta el momento, no solamente siguen todos en libertad, sino que algunos de ellos, como el Jefe de Gobierno de la Ciudad, no han sido llamados a declarar.
¿Qué duda le cabe a la llamada Justicia, de que cerrar con candado puertas que reglamentariamente deberían estar abiertas, no es estrago, es homicidio?
¿Qué duda le cabe a la llamada Justicia, de que hacer entrar cinco veces la capacidad de chicos en un local cerrado, no es estrago, es homicidio?
¿Qué duda cabe de que colocar material inflamable y portador de cianuro, en un espacio donde concurren personas, no es estrago, es homicidio?
¿Qué duda cabe de que privilegiar la ganancia antes que la vida de 6000 jóvenes de los cuales 195 no volvieron a casa no es estrago, es homicidio?
¿Y qué duda cabe, no solamente para el Poder Judicial, sino para el Poder Legislativo, para la sociedad toda, de que semejantes niveles de corrupción y faltas de controles sólo fueron posibles con la absoluta complicidad del poder político, encarnado en el Jefe de Gobierno de la Ciudad y todos sus funcionarios?
El cambio de carátula para Chabán, no somos ingenuos, puede abrir el camino para diluir la responsabilidad de Aníbal Ibarra, y del Gobierno Nacional en la figura de Aníbal Fernández (responsable directo del accionar de la Policía y los Bomberos). Si le bajan la responsabilidad a Chabán, se la pueden bajar a todos.
En el marco del Poder Legislativo, el Juicio Político al jefe de Gobierno no es, como Ibarra quiere hacernos creer, una maniobra golpista ni desestabilizadora producto de la imaginación de un grupo de padres doloridos. Es un mecanismo legal previsto por la Constitución. Ahora claro, ese mecanismo legal, en este país, puede funcionar como debiera, de manera contundente, haciendo lugar a las numerosas pruebas, o puede funcionar como lo está haciendo. En ese sentido, repudiamos la actitud de Ibarra en el gesto de recusar el pedido de Juicio Político de la Comisión Investigadora de la Legislatura. Es tan alto su grado de cinismo, que en su descargo no buscó en ningún momento demostrar su inocencia, sino por el contrario, demostrar que los legisladores son más corruptos que él mismo. Si en la gestión de Ibarra no existió complicidad con empresarios corruptos, entonces ¿por qué cerró, después de Cromagnon, casi todos los boliches y lugares de diversión? Es una aceptación de que nada funcionaba como era debido.
¿Qué está pasando con los legisladores kirchneristas y macristas, que se habían comprometido a hacer prosperar pronto el Juicio Político? Los hechos muestran postergaciones en la decisión. ¿Qué esperan los legisladores para hacer lo que deben, aquello a lo cual su mandato los obliga? ¿Será que están especulando con los resultados de las próximas elecciones?
Entonces decimos lo que estamos viendo:
En el Juicio Penal, cambio de carátula y dilaciones para más adelante. En el Juicio Político, vueltas y más vueltas para llegar a una decisión. ¿Será para llegar a una verdad que es evidente, o será para desgastarnos en la lucha, aislarnos, someternos a maniobras, y evitar que la sociedad toda siga recordando a nuestros pibes?
Hoy, a 9 meses de tanto manoseo institucional, sentimos que las pruebas sobran, lo que falta es la justicia. Y el gran motivo es la impunidad.
Desde un principio señalamos el pacto de complicidad entre Ibarra y Kirchner para silenciar la masacre de Cromagnon, pasando todo para después de las elecciones de octubre. Hoy la realidad nos da la razón. Aníbal Fernández, ministro de Kirchner, sale a respaldar a Ibarra, y un supuesto accionar coordinado, cuando hace un mes Crespo Campos, responsable de Emergencias de la Ciudad, declaraba acerca del caos que dominó la ciudad la noche del 30, la improvisación y la ausencia de dispositivos de emergencia adecuados, algo que todos vimos y vivimos esa noche.
En estas elecciones se van a gastar millones de dólares en publicidad y gastos operativos. ¿Qué problemas de los que tenemos los argentinos se van a solucionar con estas elecciones? El desempleo, los precios inalcanzables, no. La salud, la educación y el trabajo seguirán en ruinas. El dinero utilizado para las elecciones podría usarse para acondicionar los hospitales pùblicos, por ejemplo, y brindar la atención adecuada a los miles de sobrevivientes.
Las cuestiones fundamentales para el pueblo siguen sin resolverse, mientras el gobierno gasta más de 40 millones de pesos para garantizar la llegada del terrorista Bush a la Argentina.
Debemos saber también que aquellos a quienes votamos, tienen luego una responsabilidad. La primera, dar cuenta de sus actos. Como NO lo están haciendo Ibarra, Kirchner ni aquellos legisladores que dilatan el Juicio político.
La llamada Justicia cuida más los derechos de los asesinos y corruptos, que los de los sobrevivientes. Estamos siguiendo con atención las irregularidades que se presentan al momento de indagar a los testigos, sin garantías de contención psicológica, con largas antesalas de espera. Seguimos preocupados por la situación de los sobrevivientes, por su salud, por su necesidad de ser escuchados.
Otros jóvenes siguen siendo víctimas a cada momento. Sea por patovicas, sea por el gatillo fácil, sea por los lugares bailables como lo ocurrido recientemente en el boliche Chicharrón. ¿Cuántos más tienen que morir? Veamos como sociedad, cuántos Cromagnones latentes en tantos lugares, por falta de inversión por parte del Estado.
Que existan 22 procesados, con esta Justicia, es un triunfo de la movilización y la memoria de todos nosotros, el pueblo. En nuestra memoria está: fue asesinato, y tiene responsables y cómplices concretos. Estamos aprendiendo que será la solidaridad y la movilización de todos nosotros lo que determinará los resultados de nuestra lucha. La fuerza de la movilización quedó expresada en una marcha federal que reunió más de 40.000 personas, entre ellos nosotros, familiares de Cromagnon, y que fue silenciada por los grandes medios.
Agradecemos la presencia de organizaciones barriales, vecinales, políticas, solidarias, en lucha y convocamos a quienes aún no se hayan sumado, a hacerlo. Invitamos a todas y todos a iniciar un diálogo que nos permita armar un gran MOVIMIENTO CONTRA LA IMPUNIDAD.
Agradecemos en particular la presencia de los músicos que nos acompañan, que están comprometidos con nuestra lucha. Nuestros hijos amaban la mùsica y necesitan la palabra y el compromiso de ustedes y de todos. Llamamos a quienes no se han pronunciado, a hacerlo y a acompañarnos con la palabra y el cuerpo.
A 9 meses de la masacre decimos:
- No al cambio de carátula para Chabán que abre el camino para la impunidad de empresarios y funcionarios
- No a la utilización de nuestro dolor con fines electorales
- Sí al Juicio Polìtico a Ibarra, y ya.
- Indagatoria a Ibarra ya
- Repudiemos el fallo equívoco de los jueces por el cual Ibarra y sus funcionarios deslindan responsabilidades
- Carcel a Ibarra, Chabán y todos los responsables para terminar con la impunidad.
NO ES ESTRAGO, ES HOMICIDIO:
* cerrar con candado las puertas de emergencia no es estrago, es HOMICIDIO
* hacer entrar cinco veces la capacidad de gente que permitía el local, no es estrago, es HOMICIDIO
* colocar material inflamable y venenoso no es estrago, es HOMICIDIO
* privilegiar la ganancia antes que la vida de 6000 jóvenes de los cuales 195 no volvieron a casa, no es estrago, es HOMICIDIO
* cuando la muerte ocurre entre coimas, corrupción y falta de controles, no es estrago, es HOMICIDIO
* la falta de procesamiento de Aníbal Ibarra, Aníbal Fernández y todo el poder político, no es justicia, es IMPUNIDAD Y ENCUBRIMIENTO.
LOS PIBES PRESENTES
AHORA Y SIEMPRE
(*) yo acá creo que hay que poner también lo que se gasta en traer a Bush a Mar del Plata, a la Cumbre de las Américas.
(**) acá para mì habría que poner una convocatoria con fecha concreta (me parece)
NO ES ESTRAGO, ES HOMICIDIO
9 meses tardamos en gestar un hijo. Nueve meses llevamos de lucha, construyendo caminos entre nosotros, y encontrando piedras que intentan llevarnos a la desesperanza. A 9 meses, en lugar de un nacimiento, nos encontramos con un nuevo asesinato.
Cuando los grandes medios decían la tragedia de Cromagnon, nosotros decíamos, con razón, la masacre de Cromagnon. Masacre, asesinato en masa.
Cuando ahora la llamada Justicia, o mejor dicho el Poder Judicial, dice estrago para calificar el crimen cometido por Chabán, Ibarra y otros, nosotros decimos asesinato, homicidio. Decimos que hay que respetar la primera calificación del delito que hacía la jueza Crotto, homicidio simple con dolo eventual.
Porque nos parece terrible, y no es nada inocente, sacar de nuestra cabeza y nuestro corazón la palabra justa para lo sucedido el 30 de diciembre del 2004. Fue un asesinato. Fue un homicidio. Agravado por la cantidad enorme de víctimas. Ese homicidio tiene responsables claros y concretos que hasta el momento, no solamente siguen todos en libertad, sino que algunos de ellos, como el Jefe de Gobierno de la Ciudad, no han sido llamados a declarar.
¿Qué duda le cabe a la llamada Justicia, de que cerrar con candado puertas que reglamentariamente deberían estar abiertas, no es estrago, es homicidio?
¿Qué duda le cabe a la llamada Justicia, de que hacer entrar cinco veces la capacidad de chicos en un local cerrado, no es estrago, es homicidio?
¿Qué duda cabe de que colocar material inflamable y portador de cianuro, en un espacio donde concurren personas, no es estrago, es homicidio?
¿Qué duda cabe de que privilegiar la ganancia antes que la vida de 6000 jóvenes de los cuales 195 no volvieron a casa no es estrago, es homicidio?
¿Y qué duda cabe, no solamente para el Poder Judicial, sino para el Poder Legislativo, para la sociedad toda, de que semejantes niveles de corrupción y faltas de controles sólo fueron posibles con la absoluta complicidad del poder político, encarnado en el Jefe de Gobierno de la Ciudad y todos sus funcionarios?
El cambio de carátula para Chabán, no somos ingenuos, puede abrir el camino para diluir la responsabilidad de Aníbal Ibarra, y del Gobierno Nacional en la figura de Aníbal Fernández (responsable directo del accionar de la Policía y los Bomberos). Si le bajan la responsabilidad a Chabán, se la pueden bajar a todos.
En el marco del Poder Legislativo, el Juicio Político al jefe de Gobierno no es, como Ibarra quiere hacernos creer, una maniobra golpista ni desestabilizadora producto de la imaginación de un grupo de padres doloridos. Es un mecanismo legal previsto por la Constitución. Ahora claro, ese mecanismo legal, en este país, puede funcionar como debiera, de manera contundente, haciendo lugar a las numerosas pruebas, o puede funcionar como lo está haciendo. En ese sentido, repudiamos la actitud de Ibarra en el gesto de recusar el pedido de Juicio Político de la Comisión Investigadora de la Legislatura. Es tan alto su grado de cinismo, que en su descargo no buscó en ningún momento demostrar su inocencia, sino por el contrario, demostrar que los legisladores son más corruptos que él mismo. Si en la gestión de Ibarra no existió complicidad con empresarios corruptos, entonces ¿por qué cerró, después de Cromagnon, casi todos los boliches y lugares de diversión? Es una aceptación de que nada funcionaba como era debido.
¿Qué está pasando con los legisladores kirchneristas y macristas, que se habían comprometido a hacer prosperar pronto el Juicio Político? Los hechos muestran postergaciones en la decisión. ¿Qué esperan los legisladores para hacer lo que deben, aquello a lo cual su mandato los obliga? ¿Será que están especulando con los resultados de las próximas elecciones?
Entonces decimos lo que estamos viendo:
En el Juicio Penal, cambio de carátula y dilaciones para más adelante. En el Juicio Político, vueltas y más vueltas para llegar a una decisión. ¿Será para llegar a una verdad que es evidente, o será para desgastarnos en la lucha, aislarnos, someternos a maniobras, y evitar que la sociedad toda siga recordando a nuestros pibes?
Hoy, a 9 meses de tanto manoseo institucional, sentimos que las pruebas sobran, lo que falta es la justicia. Y el gran motivo es la impunidad.
Desde un principio señalamos el pacto de complicidad entre Ibarra y Kirchner para silenciar la masacre de Cromagnon, pasando todo para después de las elecciones de octubre. Hoy la realidad nos da la razón. Aníbal Fernández, ministro de Kirchner, sale a respaldar a Ibarra, y un supuesto accionar coordinado, cuando hace un mes Crespo Campos, responsable de Emergencias de la Ciudad, declaraba acerca del caos que dominó la ciudad la noche del 30, la improvisación y la ausencia de dispositivos de emergencia adecuados, algo que todos vimos y vivimos esa noche.
En estas elecciones se van a gastar millones de dólares en publicidad y gastos operativos. ¿Qué problemas de los que tenemos los argentinos se van a solucionar con estas elecciones? El desempleo, los precios inalcanzables, no. La salud, la educación y el trabajo seguirán en ruinas. El dinero utilizado para las elecciones podría usarse para acondicionar los hospitales pùblicos, por ejemplo, y brindar la atención adecuada a los miles de sobrevivientes.
Las cuestiones fundamentales para el pueblo siguen sin resolverse, mientras el gobierno gasta más de 40 millones de pesos para garantizar la llegada del terrorista Bush a la Argentina.
Debemos saber también que aquellos a quienes votamos, tienen luego una responsabilidad. La primera, dar cuenta de sus actos. Como NO lo están haciendo Ibarra, Kirchner ni aquellos legisladores que dilatan el Juicio político.
La llamada Justicia cuida más los derechos de los asesinos y corruptos, que los de los sobrevivientes. Estamos siguiendo con atención las irregularidades que se presentan al momento de indagar a los testigos, sin garantías de contención psicológica, con largas antesalas de espera. Seguimos preocupados por la situación de los sobrevivientes, por su salud, por su necesidad de ser escuchados.
Otros jóvenes siguen siendo víctimas a cada momento. Sea por patovicas, sea por el gatillo fácil, sea por los lugares bailables como lo ocurrido recientemente en el boliche Chicharrón. ¿Cuántos más tienen que morir? Veamos como sociedad, cuántos Cromagnones latentes en tantos lugares, por falta de inversión por parte del Estado.
Que existan 22 procesados, con esta Justicia, es un triunfo de la movilización y la memoria de todos nosotros, el pueblo. En nuestra memoria está: fue asesinato, y tiene responsables y cómplices concretos. Estamos aprendiendo que será la solidaridad y la movilización de todos nosotros lo que determinará los resultados de nuestra lucha. La fuerza de la movilización quedó expresada en una marcha federal que reunió más de 40.000 personas, entre ellos nosotros, familiares de Cromagnon, y que fue silenciada por los grandes medios.
Agradecemos la presencia de organizaciones barriales, vecinales, políticas, solidarias, en lucha y convocamos a quienes aún no se hayan sumado, a hacerlo. Invitamos a todas y todos a iniciar un diálogo que nos permita armar un gran MOVIMIENTO CONTRA LA IMPUNIDAD.
Agradecemos en particular la presencia de los músicos que nos acompañan, que están comprometidos con nuestra lucha. Nuestros hijos amaban la mùsica y necesitan la palabra y el compromiso de ustedes y de todos. Llamamos a quienes no se han pronunciado, a hacerlo y a acompañarnos con la palabra y el cuerpo.
A 9 meses de la masacre decimos:
- No al cambio de carátula para Chabán que abre el camino para la impunidad de empresarios y funcionarios
- No a la utilización de nuestro dolor con fines electorales
- Sí al Juicio Polìtico a Ibarra, y ya.
- Indagatoria a Ibarra ya
- Repudiemos el fallo equívoco de los jueces por el cual Ibarra y sus funcionarios deslindan responsabilidades
- Carcel a Ibarra, Chabán y todos los responsables para terminar con la impunidad.
NO ES ESTRAGO, ES HOMICIDIO:
* cerrar con candado las puertas de emergencia no es estrago, es HOMICIDIO
* hacer entrar cinco veces la capacidad de gente que permitía el local, no es estrago, es HOMICIDIO
* colocar material inflamable y venenoso no es estrago, es HOMICIDIO
* privilegiar la ganancia antes que la vida de 6000 jóvenes de los cuales 195 no volvieron a casa, no es estrago, es HOMICIDIO
* cuando la muerte ocurre entre coimas, corrupción y falta de controles, no es estrago, es HOMICIDIO
* la falta de procesamiento de Aníbal Ibarra, Aníbal Fernández y todo el poder político, no es justicia, es IMPUNIDAD Y ENCUBRIMIENTO.
LOS PIBES PRESENTES
AHORA Y SIEMPRE
(*) yo acá creo que hay que poner también lo que se gasta en traer a Bush a Mar del Plata, a la Cumbre de las Américas.
(**) acá para mì habría que poner una convocatoria con fecha concreta (me parece)
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