De la ortoMedicina a una cual huerta
De la Ortomedicina a la Medicina como huerta: la idea de cura:¿ paradoja positivista o mediocridad narcisista médica?
© Dr. Alejandro Wajner
www.criticamedicina.blogia.com
¿ Qué significa la cura?: El triunfo de la ciencia, de las ideas y herramientas del conocimiento médico, el logro confirmatorio del poder del discurso hegemónico imperante.
Curar al Otro es desaparecer la queja, los signos y síntomas molestos, cesar el disconfort.
Situar al ser en un tiempo y espacio supuesto como normal por la dominante cultura, constituyente de sus sujetos.
Colocar la máquina biológica a punto sin desarreglos ni desbalances, adaptar a su morador a la sociedad.
La Salud sugiere un ajuste del sujeto- objeto médico a la cultura de la sociedad.
Equilibrar nuevamente al individuo a través del Poder/ saber médico.
Corregir/ enderezar/ balancear/ ajustar al organismo...
Estabilizarlo/ calmar sus tormentas biológicas/ apagar los procesos/ resetearlos.
La actual medicina exige seres sujetos a sociedades que los enferman.
No acepta procesos continuos, flujos que cambian constantemente, mutaciones que permiten y mantienen la identidad corporal.
Tampoco acontecimientos caóticos, modificables, sensibles, reflexivos de la ecología humana social ( la naturaleza humana): su contexto posibilitador.
La medicina que globaliza el saber, lo uniforma y militariza( ideas del Dr. Daniel Bistrisky: neurólogo/ filósofo), como socia del capitalismo avanzado imperial teme el desorden, la anormalidad, la incertidumbre, lo difuso, lo que escapa- huye cual nómade de su perfección, su bello discurso lujoso, cerrado, convincente, reducido a un objeto de consumo de mentes tatuadas y sensorialidades anestesiadas, sumisas y obedientes.
Todo lo que es juego, creatividad, cambio de la naturaleza humana( las enfermedades y sus padecimientos) deben abolirse para retornar a un idílico estado de bienestar.
Los humanos tenemos y usamos la queja para estar/ ser en sociedades. Es parte del lenguaje corporal, de la aparición del territorio orgánico en nuestro existir.
El dolor es lenguaje, expresión, acontecimiento de los organismos complejos, e spacios y temporalidades en cambios dialécticos, identidades que transcurren modificables- modificando.
Las quejas son maneras con las que comunicamos nuestro ser en el Mundo, el lazo que enviamos al Otro para que intervenga. El pedido de ayuda, cuidados, amor y comprensión.
Desafiemos el limitado, mediocre y unidimensional discurso médico, controlado por el poder económico/ político/ cultural.
El dolor, el malestar, la intolerancia que los cuerpos expresan deben anularse, simplificar a cero a un supuesto equilibrio, balance perfecto, estado de quietud en vez de aprender al atravesarlo, entrenando en el dolor como parte de la condición animal y sociocultural.
Seres adaptados a sociedades destructivas, agresivas, crueles, desafectas y tóxicas, contaminantes, adictivas no puede seguir siendo la misión del médico, obediente de unos supuestos sabios...del Norte.
Podemos entrenar cuerpos en la Resistencia social al Poder, a las adicciones, al autoritarismo reinante.
Los cuerpos en queja expresan la alienación social de nuestra condición humana, el malestar en la cultura que los condiciona y que el positivismo: el posibilismo técnico y su eficacia y eficiencia mercantil, ignoran.
Colaboremos como ayudantes/ entrenadores de cuerpos históricos- sujetos activos: amorosos y pacíficos, solidarios y comprometidos con los Otros.
Construyamos un nuevo discurso/ praxis de cambio.
Incorporemos lo negado, rechazado, abramos la Medicina a todos los saberes.
Aceptemos la poética de los cuerpos, las subjetividades, la cultura contextual y naveguemos en la incertidumbre y sus multiplicidades, humildemente.
Atravecemos la mediocre soberbia, que oculta nuestra ignorancia y miseria y ma quilla el exitismo médico: la persecución del dinero y poder y la gloria social.
Acerquémonos a esos cuerpos que cambian, repiten, presentan caos, desorden, nos provocan y desafían: permitamos el Encuentro.
Superemos esta orto- Medicina que pretende enderezar los cuerpos en estas sociedades enfermas por una que acepte y cultive cuerpos creativos, amorosos, cual huertas.
© Dr. Alejandro Wajner
www.criticamedicina.blogia.com
2006
1 comentario
JJESUS PEREZ MEZA -