Uno mismo y el alcohol Dr.Guidos
Empecé a beber en las fiestas, en las reuniones "científicas", primero la
cervecita, después el Vodka . Y luego me encontré a alguien a quien de
verdad le gustaba el alcohol , bebíamos los fines de semana, después
terminamos bebiendo cada día, pero eso si........ "social". No logre llegar
hasta la cirrosis y los vómitos de sangre.
El alcohol hace hablar a los mudos . Es la espiritualidad hasta la demencia
de la lógica, es la razón que intenta dar soluciones y comprender hasta la
locura el porque de esta sociedad, el por qué este Reino de la
Injusticia...al día siguiente siempre concluimos en la misma
desesperación. Cuando se ha bebido demasiado, volvemos al principio del
ciclo infernal de la vida. Se habla de felicidad, se dice que es imposible,
pero no sabemos lo que quiere decir la palabra.
---------------
A veces yo mismo no sé si soy uno de los nuestros o uno de los otros. Eso es
lo malo. Mientras más lo cavilo más difícil me resulta distinguir entre
nosotros y los otros. Si se los mira con atención, cada uno de los nuestros
es condenadamente parecido a uno de los otros: y viceversa. A veces yo mismo
no sé si soy uno de los nuestros o soy un otro. Lo preferible sería ser yo
mismo, pero esto pareciera ser ................ .............. imposible
cervecita, después el Vodka . Y luego me encontré a alguien a quien de
verdad le gustaba el alcohol , bebíamos los fines de semana, después
terminamos bebiendo cada día, pero eso si........ "social". No logre llegar
hasta la cirrosis y los vómitos de sangre.
El alcohol hace hablar a los mudos . Es la espiritualidad hasta la demencia
de la lógica, es la razón que intenta dar soluciones y comprender hasta la
locura el porque de esta sociedad, el por qué este Reino de la
Injusticia...al día siguiente siempre concluimos en la misma
desesperación. Cuando se ha bebido demasiado, volvemos al principio del
ciclo infernal de la vida. Se habla de felicidad, se dice que es imposible,
pero no sabemos lo que quiere decir la palabra.
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A veces yo mismo no sé si soy uno de los nuestros o uno de los otros. Eso es
lo malo. Mientras más lo cavilo más difícil me resulta distinguir entre
nosotros y los otros. Si se los mira con atención, cada uno de los nuestros
es condenadamente parecido a uno de los otros: y viceversa. A veces yo mismo
no sé si soy uno de los nuestros o soy un otro. Lo preferible sería ser yo
mismo, pero esto pareciera ser ................ .............. imposible
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