Alfredo Moffatt: un gran terapeuta de los oprimidos
Historia:
Nació un 12 de enero de 1934 en una familia con genealogía inglesa y alemana. Su padre lo quiso arquitecto y él inventó una psicología social trabajando junto a Enrique Pichon Riviere durante 10 años.
Irrumpiendo en los hospicios de enfermos mentales, los excluidos del sistema económico cultural (los condenados de la tierra) y armando comunidades de afecto y trabajo.
Una idea herramienta: Crear una experiencia sin permiso y sin dinero.Trabajar la solidaridad y la cooperación.
Transformarse en el otro: metamorfosis creativa y terapéutica.Organiza a los excluidos en comunidades trabajando el afecto y el sentido.
El cuidado: la familia ortopédica (amor, afecto, alegría) y el rol o función con el trabajo o proyecto.
La comida y la alegría de juntos hacer algo posible y necesario.
Destruir la locura institucionalizada gestando humanidad en seres que viven otros Mundos imaginarios.
Un bancadero de ánimas recuperadas.
“Si uno aprende a hacer algo, puede evitarlo”
Alfredo crea una psicología del absurdo: de la locura y la pobreza, va y participa donde nadie entra: con los abandonados sociales y económicos.
Entra y sale de la peor locura, la del sistema criminal imperante, de este capitalismo colonialista.
“La mente es una historia, un sujeto arrojado al futuro”
La música, el baile popular: las rancheritas, la cumbia, la tarantela. La choriceada. Las mateadas.
El trabajo de los locos: construir la propia casa con los cuerpos activos.
Crear mundos donde los niegan y dificultan.
Alfredo es un colega del árabe africano Franz Fanon( 1925- 1961): el de “ Pieles negras, máscaras blancas” de 1952. El que explica que ser colonizado es padecer culturalmente: perder el lenguaje, absorber otro, asumir otra cultura y una civilización opresora.
“Los condenados de la tierra”, de 1961 que modificó a gente como el Che Guevara, Steve Bik( Sudáfrica)o y Ali Shariati (Irán). El comprometido con el FLN argelino contra el imperialismo francés.
Uno de los pocos psicólogos comprometidos con su pueblo pobre, hambreado, enfermo, atemorizado, golpeado por la injusticia y la desigualdad.
Con su cuerpo en los lugares de desastre social: catástrofes como Cromañón, la matanza en el shoping paraguayo, el asesinato del maestro Fuentealba en Neuquén por la política de Sobich, los pibes de la calle de Once y la lista sigue durante tantos años de entrega solidaria y terapéutica.
Alfredo es un grande. Un ser esencial. Un necesario como recita Bertold Brech.
Un popular, un condenado.
Una vida pobre de objetos y dinero. Rica en afectos, vínculos, construcciones sociales y culturales. Un modelo para la humanidad.
Ignorado por las políticas de los gobiernos cómplices con el saqueo. Por las instituciones que lo permiten. Expulsado de las universidades del discurso único, colonialista y burgués, de las asociaciones profesionales asustadas con su poder terapéutico.
La identidad es un proyecto, una aventura de vivir y caminar la vida.
Fogoneando la esperanza: el programa en el aire de Radio Nacional, AM 870, los lunes 01: 30 a 03:00 horas. (Trasnoche del domingo).
Su Escuela ( Cooperanza/ Bancavida)Rivadavia 3482, 4865 4177 Capital Federal
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adafanelli -