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Editorial de Critica Medicina por Dr.E. Guidos

En América Latina vamos perdiendo el poco respeto por esos médicos que son capaces de "juzgar" al los que se atreven a contradecirlos . Cuando se llega el día de enfrentarlos , se llega también el día de decir basta , convencidos de que tenemos la razón . Sacando fuerzas sin saber de dónde, chirríando los dientes , debemos tirar para adelante, sin mirar lo que hay detrás ni prever dónde se hallará otro refugio .
Desde El Salvador nuestro apoyo solidario

" Y así el equilibrio de un ser viviente humano se puede enunciar en dos notas: aceptación y resistencia. Aceptación de lo que efectivamente se es o no se está llegando a ser, resistencia para perseverar en cierto canon o medida derivada de la imagen ideal. Y de estas dos condiciones depende, a su vez, una calidad que podemos decir suprema del vivir personal, la
transparencia. La transparencia que se consigue, como en las moléculas cristalinas, a fuerza de regularidad, de ritmo, en suma , de forma" .
María Zambrano,
Hacia un saber sobre el alma.
ADELANTE ALEJANDRO.......desde El Salvador Nuestro apoyo Solidario.

Desde acá, desde El Salvador, puedo afirmar que este tribunal de Honor de la Asociación de Médicos Municipales esta conformado por un tipo de médicos que existen aquí, que existen allá.
Son Médicos que elevan el menor problema a la altura de la paradoja
y a la dignidad del escándalo, manejan al anatema con una crueldad teñida de fervor, edifican una obra llena de excesos, un sistema que continúa exasperándonos.
La magnitud y la elocuencia de sus cóleras, la vehemencia con que se entregan al servicio de causas indefendibles, su obstinación en legitimar más de una injusticia, su predilección por la expresión mortífera, definen a este tipo de médicos
Son médicos que no rebajándose a persuadir al enemigo, lo aniquila de entrada mediante el adjetivo. Sus convicciones poseen una apariencia de gran firmeza: a la tentación del escepticismo saben responder con la arrogancia de sus prejuicios, con la violencia dogmática de sus desprecios.

En algunos tribunales de Honor de muchos países en América latina esta presente la úlcera funesta que roe sin tregua nuestra dignidad, estos tribunales de Honor son padres de la anarquía, son los corruptores universales. No existe nada tan justo, docto e incorruptible como los tribunales de honor , por eso cada día nos convencemos, sin necesidad alguna de pruebas, de que no puede haber en el universo nada más tranquilo, circunspecto y humano por naturaleza que estos modernos tribunales de la Inquisición.

Yo creo Alejandro que sólo hay una manera de alabar: atemorizar a quien se elogia, hacerle temblar, obligarle a ocultarse lejos de la estatua que se le erige, forzarle mediante la hipérbole generosa a calibrar su mediocridad y obligarlos a sufrir por ella.

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