El negocio de la basura del empresario Macri y su pandilla
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires está promocionando lo que llama "Basura Cero". En realidad el plan del gobierno es retirar los contenedores diferenciados, reducir la recolección diferenciada solamente a casos especiales y transformar lo que es una solución de gran escala en un piloto cosmético.
Lo que promociona el gobierno NO es la Ley Basura Cero. Con el plan del gobierno la basura que genera la Ciudad continuará aumentando y alimentando los dos nuevos rellenos sanitarios que se planean instalar en el Gran Buenos Aires.
Reenviale este email a todos tus conocidos. Que todos sepan qué es realmente la Ley Basura Cero.
En el año 2005 la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó por unanimidad la Ley 1.854 de "Basura Cero" impulsada por Greenpeace, la que comenzó a implementarse durante 2007.
La Ley Basura Cero establece la meta de reducción de basura del 30% para el 2010 y para lograrlo es necesario implementar todas las herramientas establecidas en la Ley: la separación domiciliaria de residuos; la contenerización y recolección diferenciada del 100 por ciento de la Ciudad y la creación de Centros de Selección, entre otras.
Lamentablemente, el gobierno de la Ciudad desconoce la Ley y con el nombre de "Basura Cero" intenta perpetuar un sistema de gestión de residuos contaminante, basado en el enterramiento masivo de basura y en la incineración.
Con el plan actual del Gobierno porteño, anunciado públicamente durante los últimos días, no se llegará nunca a la meta establecida por la Ley, lo que conducirá irreversiblemente, a la apertura de nuevos rellenos en el Conurbano Bonaerense y a la incineración, provocando más contaminación y más enfermedades.
La Ley Basura Cero debe cumplirse a fin de que los residuos de la Ciudad puedan ser recuperados y reciclados, y de esta manera disminuir la cantidad de basura de la Ciudad.
El plan de Macri no es Basura Cero. Reenviá este mensaje a todos tus conocidos. Que todos sepan qué es realmente la Ley Basura Cero.
Muchas gracias,
Eugenia
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