Argentina: Los Niños Fumigados de la Soja
Red Latina sin fronteras
18 Noviembre 2010
Argentina: Los Niños Fumigados de la Soja
http://red-latina-sin-fronteras.lacoctelera.net/post/2010/11/18/argentina-ninos-fumigados-la-soja
Estamos reenviando porque no hay cambios. No los hay ni en la realidad ni en la actitud de la autoridad de aplicación ni de parte de organismos de DDHH
Y si los hay no se escuchan ni se ven. Porque en lo concreto lo único que tenemos es:
Que murió Ezequiel Ferreyra un niño que estaba esclavizado desde los 4 años.
Que tampoco se habló más de los niños ajeros de Mendoza, luego de la denuncia de Osvaldo Bayer (basado en fuente La Alameda).
Que el Defensor del Pueblo envió las Recomendaciones al Secretario de Agricultura para la reclasificación de los agroquímicos solicitada hacía más de 6 meses, y que accedió a ocuparse de dicho trámite , en el contexto de una huelga de hambre iniciada en su puerta, por el científico Claudio Lowy.
Que ni el Secretario de Agricultura , ni el Secretario de Agricultura doméstica se han expedido a la fecha.El primero por haber recibido el expediente con las Recomendaciones del Defensor del Pueblo de La Nación, y el segundo debería proceder de oficio per se.
Estamos hablando de trabajo esclavo infantil. De poblaciones fumigadas con veneno. De millones de enfermos y de miles de muertos entre los que ya han muertos, y aquellos que están enfermos que inexorablemente van a morir debido a estas afecciones porque además no reciben atención adecuada ni pronto socorro.
Estamos hablando de la soja.
Estamos hablando del modelo.
Estamos hablando de lo que en todos los organismos oficiales festejan, de lo que en todos los programas económicos comentan con beneplácito como la exitosa política kirchnerista.
Estamos hablando de la violación de los derechos humanos.
De la violación de los derechos del niño.
De la negligencia de la autoridad de aplicación.
Estamos hablando de la muerte de niños.
De homicidios.De esclavitud.De indefensión. De
terror mudo y líquido.
Estamos hablando de delito ambiental.
¿O de qué estamos hablando sino es de eso?
Mercedes Centena
socióloga
mercedescentena@yahoo.com
http://www.youtube.com/watch?v=5zmFTMe8cVs&feature=share
video de la fundación Alameda donde aparece el niño muerto por cáncer por los agrotóxicos
Los Niños Fumigados de la Soja
Un verdadero genocidio, de los tantos que se cometen en nuestro país todos los días.
Este es terrible, porque es una muerte lenta y los niños son conscientes de lo que les puede pasar.
El 'mosquito' es una máquina que vuela bajo y 'riega' una nube de plaguicida.
CHICOS ROCIADOS CON PESTICIDAS TRABAJAN COMO BANDERAS HUMANAS.
LOS NIÑOS FUMIGADOS DE LA SOJA Argentina / Norte de la provincia de Santa Fe
Diario La Capital
Las Petacas, Santa Fe,
El viejo territorio de La Forestal, la empresa inglesa que arrasó con el quebracho colorado, embolsó millones de libras esterlinas en ganancias, convirtió bosques en desiertos, abandonó decenas de pueblos en el agujero negro de la desocupación y gozó de la complicidad de administraciones nacionales, provinciales y regionales durante más de ochenta años.
A veces me agarra dolor de cabeza en el medio del campo. Yo siempre llevo remera con cuello alto para taparme la cara y la cabeza'.
Las Petacas se llama el exacto escenario del segundo estado argentino donde los pibes son usados como señales para fumigar.
Chicos que serán rociados con herbicidas y pesticidas mientras trabajan como postes, como banderas humanas y luego serán reemplazados por otros.
'Primero se comienza a fumigar en las esquinas, lo que se llama 'esquinero'.
Después, hay que contar 24 pasos hacia un costado desde el último lugar donde pasó el 'mosquito', desde el punto del medio de la máquina y pararse allí', dice uno de los pibes entre los catorce y dieciséis años de edad.
El 'mosquito' es una máquina que vuela bajo y 'riega' una nube de plaguicida.
Para que el conductor sepa dónde tiene que fumigar, los productores agropecuarios de la zona encontraron una solución económica: chicos de menos de 16 años, se paran con una bandera en el sitio a fumigar..
Los rocían con 'Randap' y a veces '2-4 D' (herbicidas usados sobre todo para cultivar soja). También tiran insecticidas y mata yuyos. Tienen un olor fuertísimo.
'A veces también ayudamos a cargar el tanque. Cuando hay viento en contra nos da la nube y nos moja toda la cara', describe el niño señal, el pibe que será contaminado, el número que apenas alguien tendrá en cuenta para un módico presupuesto de inversiones en el norte santafesino.
No hay protección de ningún tipo.
Y cuando señalan el campo para que pase el mosquito cobran entre veinte y veinticinco centavos la hectárea y cincuenta centavos cuando el plaguicida se esparce desde un tractor que 'va más lerdo', dice uno de los chicos.
'Con el 'mosquito' hacen 100 o 150 hectáreas por día. Se trabaja con dos banderilleros, uno para la ida y otro para la vuelta. Trabajamos desde que sale el sol hasta la nochecita. A veces nos dan de comer ahí y otras nos traen a casa, depende del productor', agregan los entrevistados.
Uno de los chicos dice que sabe que esos líquidos le puede hacer mal: 'Que tengamos cáncer', ejemplifica. 'Hace tres o cuatro años que trabajamos en esto. En los tiempos de calor hay que aguantárselo al rayo del sol y encima el olor de ese líquido te revienta la cabeza.
A veces me agarra dolor de cabeza en el medio del campo. Yo siempre llevo remera con cuello alto para taparme la cara y la cabeza', dicen las voces de los pibes envenenados.
-Nos buscan dos productores.
Cada uno tiene su gente, pero algunos no porque usan banderillero satelital.
Hacemos un descanso al mediodía y caminamos 200 hectáreas por día.
No nos cansamos mucho porque estamos acostumbrados.
A mí me dolía la cabeza y temblaba todo. Fui al médico y me dijo que era por el trabajo que hacía, que estaba enfermo por eso', remarcan los niños.
El padre de los pibes ya no puede acompañar a sus hijos. No soporta más las hinchazones del estómago, contó. 'No tenemos otra opción. Necesitamos hacer cualquier trabajo', dice el papá cuando intenta explicar por qué sus hijos se exponen a semejante asesinato en etapas.
La Agrupación de Vecinos Autoconvocados de Las Petacas y la Fundación para la Defensa del Ambiente habían emplazado al presidente comunal Miguel Ángel Battistelli para que elabore un programa de erradicación de actividades contaminantes relacionadas con las explotaciones agropecuarias y el uso de agroquímicos.
No hubo avances. Los pibes siguen de banderas.
Es en Las Petacas, norte profundo santafesino, donde todavía siguen vivas las garras de los continuadores de La Forestal.
Fuente: Diario La Capital, Rosario, Argentina
Gentileza de Arturo Avellaneda arturavellaneda@ msn.com
No dejen de reenviarlo, hagamos algo.
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