Blogia
criticamedicina

La política conservadora de la medicina

La política conservadora de la Medicina

La función económico política de la medicina es la de adaptar e integrar los cuerpos a las sociedades, sus poderes e instituciones dominantes.

Las empresas industriales y culturales: farmacéuticas y tecnológicas- la" fábrica de la salud"- crean el pensamiento, la perspectiva o visión y las conductas de la población consumidora: sean médicos, sus instituciones o los pacientes/ clientes.

El mundo es un mercado para sus intervenciones y objetos de uso y cambio.

Los médicos son agentes medicalizadores, objetos de prescripción y recetadores de sus productos. Los pacientes son clientes convertidos en eternos consumidores o compradores, guiados por ellos y por la industria cultural, de entretenimiento e información ( propaganda, publicidad y política).

Las instituciones médicas son dispositivos empresario políticos que manejan las ideas y pensamientos hegemónicos provenientes del Norte y controlan parte de la educación y permiso social para ejercer la medicina ( autorizan y avalan a sus socios si estos obedecen y complacen sus normas).

Los hospitales públicos son espacios o territorios donde grupos médicos acumulan prestigio y poder ( ganancias y beneficios) funcionando como empresas privadas.

La educación médica comienza en las universidades: públicas y privadas( vinculadas con la Iglesia católica y ciertos grupos empresarios afines).

Históricamente la iglesia católica tuvo y tiene mucho poder en América desde su conquista y aniquilamiento europeo.

Maneja la educación subvencionada por el estado y la población y tiene importante influencia en los empresarios y grupos altos y dirigentes de las naciones y en su medicina con importantes universidades y clínicas donde forma seres que perpetúan su poder.

La UBA está manejada por uniones políticos asociados a partidos políticos y a sectores empresarios, utiliza su poder educativo para construir alumnos obedientes y complacientes a sus directivas, reproductores y consumidores de sus pautas y discursos.

Luego los hospitales en poder de asociaciones con poder gremial y político, estructuradas en redes de poder/ saber con una gran influencia en la mayoría de los servicios clínico quirúrgicos organizados como empresas político económicas.

Los estudiantes pertenecen a las altas y medias clases sociales con la idea del éxito y triunfo en la escala social y la medicina es una herramienta para alcanzar el crecimiento individual y una buena posición económico cultural.

Los pacientes son medios para esos fines: la ganancia y el beneficio, instrumentos para tener gloria y cierto poder institucional.

Hay una minoría médica con funciones jerárquicas: jefes o gerentes asociados en las clínicas y sanatorios dependientes de la medicina privada manejada por inversionistas extranjeros y locales y las dependientes de los sindicatos de trabajadores devenidos nuevos empresarios.

 

Los médicos como agentes medicalizadores

El consultorio como empresa

La relación paciente/ médico es un escenario teórico e ideal de encuentro e intercambio del poder/ saber en salud pero padece de maltratos, desencuentros y malentendidos.

Consta de poco tiempo, desvalorización mutua, mecanización de la relación, seguimiento de pautas institucionales de interpretación y tratamiento de los malestares hechas para economizar y proteger judicialmente los recursos, pasos múltiples en una dinámica de fragmentación y especialización del conocimiento donde el camino a recorrer es complejo y diverso tiene inicio pero nunca termina( trayecto o recorrido kafkiano).

La precarización laboral del médico, la flexibilización de las condiciones de trabajo en beneficio de las empresas ubican al colega en una débil posición en el" mercado" de venta de su fuerza de trabajo ( sus habilidades específicas), la falta de defensa gremial real de su lábil situación económica en manos de asociaciones o gremios médicos( dedicados al autoenriquecimiento), la pertenencia a la clase media o alta, el pensamiento individualista y el afán de éxito personal, contribuyen a implementar un desafortunado vínculo con los pacientes y a padecerlos.

El poco tiempo medido en equivalentes de dinero ( nomeclados): tantos minutos representan tanto dinero, hacen que la urgencia maneje la relación y que simplifique el encuentro transformándolo en episodios de desconocimiento y malentendidos recíprocos sin afectos ni compromisos donde hay que aplicar, de la mejor y posible manera, el discurso hegemónico o "las sagradas escrituras médicas" para agilizar el tiempo y los reclamos de los devenidos clientes que urgen una solución a sus malestares.

El recurso farmacéutico está instalado culturalmente en la sociedad y reemplaza el sentido perdido de las relaciones humanas por el consumo de cosas, objetos y drogas socializadas y utilizadas en la vida cotidiana: La humanidad desvalorizada de anónimos y angustiantes vínculos entre sujetos acude a la posesión de objetos y cosas( fetiches) que suponen contener sentidos abandonados en la alienación social imperante y profundizada en el capitalismo avanzado. Una sociedad convertida en un cuerpo social necesitado de remedios recetados por los médicos y trabajadores de la salud ( enfermeros y farmacéuticos) y una breve y poco valorado espacio de reunión entre agentes de la salud y consumidores.

El médico queda reducido a un simple y efectivo agente de prescripción al servicio de la poderosa y omnipresente " fábrica de la salud" que inunda la cultura con su propaganda y difusión masiva de productos.

El capitalismo afianza la alienación social vinculada con el fetichismo de las cosas y objetos y la toxicidad de las relaciones humanas reificadas: vacías, aburridas, sin sentido.

La sociedad de masas con su anonimato y muchedumbre mecanizada provoca una sensación de soledad y abandono que trata de cubrirse con diversas estrategias tóxicas y compulsivas. El sentido de la posesión o relación con las cosas para constituir y mantener la identidad y pertenencia social y cultural acude a las drogas buscando la magia inexistente. La fábrica de salud convence a todos de la utilidad de sus productos para mantener la belleza, juventud y normalidad amenazada.

Mientras la sociedad enferma a sus habitantes transformándolos en objetos consumidos por sus leyes y normas insalubres como la rapidez y el ritmo incesante de vida metropolitano, la búsqueda del éxito compitiendo con todos, la inseguridad permanente por la violencia de la marginalidad y la miseria creciente, por la inestabilidad económica y laboral, entre otras cosas; propone y dispone a través de sus médicos e instituciones prescriptoras de un amplio consumo de drogas aceptadas como antiinflamatorios, analgésicos, ansiolíticos y antipsicóticos.

Los cuerpos socializados por el capitalismo avanzado sea central o periférico acuden a los fármacos para sobrevivir siendo parte de la maquinaria de producción industrial.

El modelo es el que caricaturiza su televisión: Homeros Simpson y sus familiares y vecinos o los de Disney con su maltrato, hipocresía y soberbia aceptado por la diversión que pretenden.

Seres pasivos, sin capacidad reflexiva, aceptadores de las normas, obedientes y agresivos pero nunca cuestionadores de sus propios modelos culturales y sociales.

Los médicos nos preparamos para simplificar la relación compleja y descomprometernos con el poder prescriptivo de las recetas, simples pasos en el circuito manejado por la fábrica de la salud.

Desde los múltiples análisis tecnológicos a las intervenciones más complejas: los pacientes son clientes de eterno consumo industrial para mantener, mejorar o superar sus propios cuerpos en una medicina técnica y adicta al poder capitalista.

El discurso o lenguaje de la medicina, la economía y la abogacía atraviesa la sociedad y la constituye.

Está transformada en " cuerpo social", en un " mercado" de oferta y demanda monopolizada y en un palacio de tribunales donde las relaciones interpersonales son beligerantes y necesitan de justicia normatizada.

"La ideología es el negocio" y cada grupo lo trata de aplicar en este todos contra todos de la competencia desigual mercantilista.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

2 comentarios

Hasta pone a su hija a Pedir -

No se conforma con ensuciar la Web con su nombre y pedir decaradamente "donaciones", tambien utiliza a su hija menor a pedir
http://ecuador.indymedia.org/es/2007/01/18070.shtml

LIC. MARIA RAQUEL HOLWAY RAMOS MEJIA -

APADESHI ES UNA ORGANIZACION QUE ASESORA COMO SECUESTRAR NIÑOS
por LIC. MARIA RAQUEL HOLWAY RAMOS MEJIA Saturday, Nov. 04, 2006 at 11:58 AM
RACHELHOLWAY@YAHOO.COM 1558721823 LAVALLE 1382 BUENOS AIRES


SE RUEGA DIFUNDIR AMPLIAMENTE PARA PROTEGER A LOS NIÑOS.


HAGAMOS JUSTICIA IMPIDAMOS QUE SECUESTRADORES HABLEN EN LA HONORABLE CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION ARGENTINA


TENEMOS DEMOSTRADO QUE APADESHI ASESORA COMO SECUESTRAR MENORES EN VARIAS CAUSAS EN TRIBUNALES DE TODO EL PAIS


TENEMOS PROBADO QUE ELSA GONZALEZ FIRMA ESCRITOS CON DISTINTOS TOMOS COMO ABOGADA, SUPUESTAMENTE TODOS DE CAPITAL FEDERAL.

TENEMOS PROBADO QUE ASESORAN A COMETER OTROS DELITOS ABERRANTES.

TENEMOS PROBADO QUE QUIEREN QUE NO SE INVESTIGUEN LAS VIOLACIONES.

TENEMOS PROBADO QUE CASI TODOS LOS MIEMBROS DE APADESHI TIENEN CAUSAS POR ART 119, 120, 130, 89, 146 DEL CODIGO PENAL ARGENTINO

TENEMOS PROBADO QUE LA LEY 24270 ES ANTICONSTITUCIONAL POR SER PENAL ABIERTA , QUE VA CONTRA LA CONSTITUCION DE 1994, CONTRA LA CONVENCION DE LA NIÑEZ, CONTRA LA LEY 26061, CONTRA TODAS LAS CONVENCIONES DE DERECHOS HUMANOS FIRMADAS POR LA REPUBLICA ARGENTINA.
NO SE PUEDE PERMITIR QUE HAYA EN LA ARGENTINA LEYES PENALES ABIERTAS QUE LE PUEDAN CAER A CUALQUIER PERSONA, QUE NO REQUIERAN PRUEBAS, NI TESTIGOS. Y QUE PERSONAS QUE TIENEN EXCLUSIONES DOMICILIARIAS PUEDAN PONER UNA CAUSA DE 24270.









4 de Noviembre de 2006


















"Quiero justicia"

Susana Espósito estuvo un mes y medio sin ver a su hija porque su ex la secuestró.Un grupo de abogados cercanos a APADESHI estarían involucrados en el caso.
Cuando Susana Espósito se casó con Ramón Balcells difícilmente podía imaginar que años más tarde su esposo se llevaría a Bárbara(12) la hija que tienen en común, para impedir que la viera. Y mucho menos que una organización de abogados lo ayudaría para esconder a la menor. “En diciembre del ´91 comenzamos a vivir con Ramón, en el 94 nació Bárbara, luego de varias idas y vueltas nos separamos en el 2003 de manera definitiva”, cuenta Susana.
Al principio el hecho de ver a Bárbara no había creado ningún conflicto, pero con el tiempo las cosas comenzaron a cambiar “Vivía con miedo de que él se escapara con mi hija, era algo que sentía, hasta que el 12 de julio de 2004 Bárbara no llegó a casa”.
SECUESTRO. En esos momentos, según cuenta Susana, su situación económica no era buena y eso llevaba a tener que privarse junto a su hija de muchas cosas, ese contraste era evidente para Bárbara que veía en la casa de su padre todo la que no encontraba en lo de su madre con quién vivía, y por eso Bárbara quería pasar más tiempo con su padre. “Cuando el 12 de julio llamo a Ramón para decirle que Bárbara no había llegado del colegio y que me ayude a buscarla, me respondió que Bárbara estaba con él y que si yo quería verla vaya a la justicia porque de otra manera no la iba a ver más, que había tomado una decisión que no tenía vuelta atrás”, recuerda Susana.
En ese entonces Susana no sabía con que se iba a encontrar, hasta que se entera que a su ex esposo lo estaba defendiendo una abogada llamada Elsa Graciela González y que según decían en el Juzgado pertenecía a APADESHI (Asociación de Padres Alejados de sus Hijos). “En los juzgados se decía que Elsa González trabajaba para APADESHI, incluso un juez me aseguró que esa señora era peligrosa por la manera que tenía de hacer las cosas. Cuando se allanó el lugar donde estaba mi ex esposo para recuperar a mi hija, comencé a sospechar que lo que decían era verdad”.
Bárbara hoy tiene 12 años y recuerda con detalles todo lo que le tocó vivir: “cuando escucho que un hombre llega a donde vivía y preguntan por mi papá, Elsa González me lleva a un auto y me dice que me quede agachada ahí y que no me mueva, yo tenía mucho miedo pero no entendía lo que estaba pasando”, cuenta Bárbara.
En ese momento la situación para Ramón y su entorno estaba llegando a un punto peligroso, tanto es así que Ramón fue detenido pero Bárbara seguía sin aparecer “en el auto me llevaron hasta la casa de la mucama de Elsa González, yo no la conocía. Elsa me dijo que me tenía que quedar ahí porque si iba a la casa de ella me podían encontrar”, recuerda Bárbara
Con Ramón detenido, el paradero de Bárbara preocupaba cada vez más a la familia “Después me llevaron a un hotel, me acuerdo que estaba muy angustiada y no paraba de llorar, le pedía a Elsa que me llevara a ver a mi papá o a mi mamá, pero ella me respondía que si yo contaba todo, mi papá iba a pasar 15 años en la cárcel”, agrega
Mientras todo esto pasaba la imagen de Susana pidiendo por su hija aparecía en televisión, situación que ponía más nerviosa, según dice Bárbara, a la gente que la cuidaba “yo salía a la calle con capucha para que no me vieran. Un día Elsa me comentó que iba a ir al juzgado pero que tenía que decir que la había conocido ese mismo día y que cuando me preguntaran debía contar todo en contra de mi mamá porque sino mi papá iba a la cárcel”, recuerda con angustia.
REENCUENTRO. Cuando Susana llegó al juzgado se encontró con que su hija no la quería ver, pero en ese momento la psicóloga que la atendió a Bárbara, le confesó que su hija estaba siendo presionada y que por tal motivo no estaba diciendo la verdad. “No podía entender por qué mi hija no me quería ver, pero igualmente me sentía feliz porque la habían encontrado; después que Bárbara contó toda la verdad no podía creer todo lo que había pasado”, relata Susana.
Susana estuvo sin poder ver a su hija un mes y medio y después recuperarla, presentó una denuncia en contra de la abogada Elsa Graciela González en el Colegio de Abogados detallando todo lo que había declarado su hija respecto a Elsa González. “Presenté los datos al Colegio de Abogados confirmándoles mi denuncia (causa N° 18.199/04) contra Elsa Graciela González y contra el abogado Luis Felipe Carvallo D’onofrio, que también decía pertenecer a APADESHI, pero todavía no tuve ninguna respuesta”.
APADESHI. José María Bouza es presidente de la institución y recibió a SEMANA en su oficina de la calle Entre Ríos.
-¿Cómo comenzó la institución?
Yo estaba impedido de tener contacto con mi hija, pasé casi tres años sin poder verla, y los juzgados no hacían nada por revertir esa situación, en ese momento surgió la idea de nuclear a la gente que estuviera en la misma situación, así parece APADESHI.
-¿Cuál es su rol específicamente?
Nosotros nos encargamos de orientar a los padres y abuelos, trabajamos, tratamos de esclarecer las cuestiones jurídicas, con abogados que nos enseñan.
-¿Tienen un grupo estable de abogados?
No trabajamos con un grupo estable, por lo general consultamos con los que tenemos relación desde hace más tiempo.
-¿Conoce a Elsa Graciela González?
Si, ella fue mi abogada en el caso de mi hija, por eso la estimo mucho y tengo una amistad desde hace años, pero no trabaja con nosotros.
-¿Conoce el caso de Susana Espósito?
Lo conozco por arriba, pero no sé muy bien como fueron las cosas, sé que ella tuvo dificultades.
-¿Sabe que al nombre de APADESHI se lo vincula con ella y otros abogados que también tienen denuncias?
Puede ser que se vincule a APADESHI, pero nosotros no representamos causas; Elsa estuvo siempre cerca de APADESHI, pero nunca estuvo incorporada.
-¿No le preocupa que una abogada que está acusada de irregularidades, en una causa de secuestro, esté cerca de APADESHI?
Ella es la persona que me ayudó a recuperar a mi hija, es abogada y es natural que esas cosas pasen. Si hay una irregularidad lo tiene que determinar un juez.
-¿Quiénes son las personas que representan a APADESHI a parte de Ud.?
La comisión y los nombres son privados.
Por último agrega “acá no hay nada raro, solamente hay gente que nos quiere desprestigiar”, termina José María Bouza.
Esteban Veiga